Pregunta: ¿actuará la gente por instinto, o alguien tendrá que señalarle siempre el modo de obrar?
Krishnamurti: el instinto no es cosa en la que pueda confiarse. Porque el instinto ha sido tan pervertido, está tan amarrado por la tradición, por la autoridad, por las condiciones ambientales, que ya no podemos confiar en él. O sea, el instinto de posesión es una cosa falsa, antinatural. Le explicaré por qué. Ha sido creado por una sociedad basada en la seguridad individual; por lo tanto, el instinto de posesión ha sido esmeradamente cultivado a lo largo de generaciones. Decimos: ‘soy instintivamente posesivo. Está en la naturaleza humana ser posesivo’; pero si realmente lo considera, verá que el instinto de posesión ha sido cultivado por condiciones falsas; en consecuencia no es un verdadero instinto. Así tenemos muchos instintos que han sido falsamente fomentados, y si dependemos de otro para que nos saque de estos patrones falsamente instintivos, entonces caeremos en otra jaula, crearemos otro conjunto de patrones que volverán a desnaturalizar nuestra acción. Mientras que, si examinamos realmente cada instinto y no tratamos de identificarnos con él, sino que procuramos descubrir su significado, entonces de allí surge una acción natural y espontánea, la verdadera intuición (13).